Un Encuentro Estratégico en la Oficina Oval
El presidente salvadoreño Nayib Bukele visitará este lunes la Casa Blanca para reunirse con Donald Trump, en un encuentro que busca consolidar la cooperación bilateral en seguridad y deportaciones masivas. La cita ocurre días después de que EE.UU. elevara la calificación de viaje a El Salvador a Nivel 1, reconociendo su mejora en seguridad.
Claves del Acuerdo
- Foco en seguridad: Colaboración para usar la prisión CECOT de El Salvador como centro de detención de pandilleros de MS-13 y Tren de Aragua.
- Polémica legal: La Corte Suprema de EE.UU. ordenó al gobierno de Trump facilitar el retorno de Kilmar Abrego García, deportado por error a El Salvador.
- Presión política: El Congresional Hispanic Caucus exigió a Bukele la liberación de García, calificando su detención como «ilegal e inmoral».
Intereses Económicos y Migratorios
Con 2.6 millones de salvadoreños residiendo en EE.UU. y remesas que representan el 24% del PIB de El Salvador, Bukele buscaría claridad sobre políticas migratorias y el Estatus de Protección Temporal (TPS). Además, analistas prevén que abordará los aranceles del 10% impuestos por Trump, que podrían afectar la inflación del país.
Críticas y Simbolismo
Expertos como Elisabeth Malkin del International Crisis Group señalan que este encuentro «legitima tácticas autoritarias». Mientras, el video propagandístico de Bukele llegando a Joint Base Andrews, con su icónico estilo en negro y lentes oscuros, refuerza su imagen de líder fuerte aliado de Washington.