Un juez federal ordenó este jueves a la administración de Donald Trump preservar los chats de altos funcionarios en la aplicación Signal, incluyendo una polémica conversación filtrada accidentalmente a un periodista sobre una operación militar en Yemen.
La demanda, presentada por el grupo American Oversight, alega que la función de autodestrucción de Signal viola la Ley de Registros Federales. «Aún estamos determinando qué registros tienen las agencias», admitió la abogada del Departamento de Justicia, Amber Richer.
El periodista Jeffrey Goldberg, editor de The Atlantic, recibió por error el chat donde se detallaba una operación militar pendiente. Aunque la Casa Blanca negó que fuera «clasificada», los mensajes revelaban plazos y alcance operativo. 
«Inicialmente, el chat estaba programado para autodestruirse en una semana», reveló The Atlantic sobre Mike Waltz, asesor de seguridad nacional.
En redes sociales, Trump calificó de «vergonzoso» que Boasberg lleve casos sensibles, insinuando falta de imparcialidad. 
El juez exigió preservar todos los mensajes de Signal en el periodo crítico, no solo los filtrados. Esto amplía la investigación a posibles prácticas evasivas de registro gubernamental.
Este caso se suma a más de 70 demandas contra la administración Trump en cortes federales.
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