Ministro de Justicia en el ojo de la tormenta por audios sobre beneficiar a expolicía criminal
El ministro de Justicia, Juan José Santiváñez, enfrenta una crisis política tras la difusión de audios donde gestionaba supuestos beneficios para Miguel Marcelo Salirrosas, alias “El Diablo”, integrante de la organización criminal “Los Injertos de K y K”.

Reconocimiento de reuniones y audios comprometedores
Santiváñez admitió haber recibido en su despacho, cuando era ministro del Interior, a la esposa del sentenciado. En los audios difundidos por Cuarto Poder y Panorama, se le escucha prometer “mover cielo y tierra” para trasladar a “El Diablo” del pabellón 15 al 13 en el penal El Milagro de Trujillo, y solicitar la intervención del entonces ministro de Justicia, Eduardo Arana.
“Hermano, oye, escúchame, nomás. No te quiero molestar. Rapidísimo nomás. Lo que pasa es que han venido al ministerio los familiares de los policías, ¿ya? ¿Y te acuerdas de que te hablé de Marcelo Salirrosas, el que está en Trujillo?”
Defensa y acusaciones cruzadas
El ministro negó conductas criminales y argumentó que su actuación no constituye patrocinio ilegal, respaldado por una casación de la Corte Suprema. Su abogado, Stefano Miranda, exigió pericias para verificar la autenticidad de los audios y afirmó: “No existe ningún tráfico de llamadas ni ninguna solicitud ilícita”.
Análisis legal sobre posibles delitos
El penalista Luis Lamas Puccio señaló que si Santiváñez recibió honorarios antes de asumir como ministro, no habría delito de patrocinio ilegal, pero advirtió que una “promesa” desde un cargo ministerial podría configurar tráfico de influencias.
Reacciones políticas y mociones de censura
La congresista Ruth Luque anunció una moción de censura contra el premier Arana, mientras que Susel Paredes impulsa otra contra Santiváñez. Ambos fueron citados a la Comisión de Fiscalización del Congreso para responder por los audios. Santiváñez postergó su comparecencia por actividades en Amazonas.
- Citación: Sesión reprogramada para mañana a las 10:00 a.m.
- Posicionamientos: José Jerí (presidente del Congreso) minimizó el caso, mientras Luis Aragón lo calificó de “juego político”.