Una elección que divide a la comunidad universitaria
La Junta de Síndicos de Florida A&M University (FAMU) eligió este viernes a Marva Johnson, ejecutiva de telecomunicaciones y exmiembro de la Junta de Educación de Florida designada por el gobernador Ron DeSantis, como nueva presidenta de la institución en una votación 8-4 que desató críticas por presunta injerencia política.

Puntos clave del conflicto:
- Salario récord: $750,000 anuales, $150k más que su predecesor
- Oposición registrada: Petición con 13,000 firmas contra su nombramiento
- Críticas principales: Falta de experiencia en educación superior y vínculos con la agenda de DeSantis
«Hubo una falta de profundidad intelectual y una desconexión cultural dolorosamente evidente»
– Kristin Harper, síndica opositora
El fantasma de la política
La designación ocurre en un contexto de reforma educativa impulsada por DeSantis, que incluye restricciones a cómo se enseña la historia afroamericana. Johnson intentó calmar ánimos en un foro público: «No soy un caballo de Troya. No me enviaron para desmantelar FAMU».
Reacciones destacadas
- Will Packer (productor de Hollywood y alumno): «Sin el apoyo de estudiantes y exalumnos, es receta para el desastre»
- Kennedy Williams (vicepresidente estudiantil): «Inquietante que ignoren nuestra voz»

Antecedentes que agravan la crisis
La universidad aún se recupera del escándalo por una donación falsa de $237 millones bajo la administración anterior. Senador Shevrin Jones (alumno) advirtió: «El primer desafío de Marva será unir a la universidad».