Memorias de una Comunidad Transformada
Quienes crecieron en Little Haiti recuerdan mujeres con cestas en la cabeza, bandas de Rara llenando las noches de música y aromas de gastronomía haitiana. Hoy, esta comunidad que acogió generaciones de inmigrantes enfrenta cambios drásticos: los residentes haitianos se reducen y luchan por preservar su identidad.

Datos que Alarman: Propiedad y Demografía
- Viviendas ocupadas por dueños: Solo 10% de 7,269 unidades
- Propiedades compradas por inversionistas externos: 37% desde 2019
- Población haitiana: 8,152 residentes (37% del total), con disminución del 5% desde 2010
Voces de Resistencia
Ashley Toussaint, copropietario de una vivienda familiar desde 1988, describe cómo la expulsión del complejo Sabal Palm (ahora Design Place) marcó el inicio de la transformación: «Pasó de ser una comunidad haitiana a una blanca y latina». Recibe ofertas de $250,000 por una propiedad valorada en $700,000.
Cassel Paul, cuyos padres llegaron en 1971, rechaza compradores predatorios: «Si venden, ¿dónde vivirán?». Señala que 50% de propietarios y 63% de inquilinos destinan más del 30% de sus ingresos a vivienda.
Estrategias de Supervivencia
Familias como la de Erica Desinord optan por alquileres temporales: «Mi abuelo trabajó sin educación para este hogar. Mantendremos su ‘no’ a la venta». Actualmente existen 415 propiedades de Airbnb en Little Haiti.
Iniciativas Institucionales
El Little Haiti Revitalization Trust, bajo el liderazgo de Joann Milord, impulsa programas de asistencia para compra y rehabilitación de viviendas. Aunque reconocen que «el desarrollo es una fuerza imparable», buscan integrar a la comunidad existente. Su plan estratégico será votado en septiembre.
«Es vital preservar a los haitianos que quedan y ayudarlos a ascender económicamente» – Joann Milord, CEO del Trust