Despliegue militar inusual en Maracaibo ante rumores de ataques estadounidenses
Este viernes, tras extenderse la noticia sobre un posible ataque de Estados Unidos contra objetivos militares en Venezuela, fuerzas de seguridad uniformadas se desplegaron en las calles de Maracaibo, la segunda ciudad más grande del país, deteniendo a conductores, motociclistas y transeúntes en puntos de control, donde fueron interrogados y se les exigieron documentos de identificación.

Reacciones ciudadanas y normalidad aparente
A pesar de la tensión, los residentes de Maracaibo, centro de la vital industria petrolera venezolana, mostraron una actitud serena: las personas llevaron a sus hijos a la escuela, utilizaron el transporte público y comenzaron sus turnos de trabajo. Mientras tanto, el canal estatal Venezolana de Televisión transmitió un discurso del líder Nicolás Maduro e informó sobre manifestaciones contra las amenazas de Estados Unidos.
Al mediodía, sin noticias de misiles entrantes, el despliegue militar en las calles de Maracaibo pareció disminuir.
Voces de la población: esperanza y temor
Gerardo, un trabajador de la construcción de más de 60 años, expresó su deseo de cambio para Venezuela:
«Lo que los venezolanos queremos es que haya libertad para todos, buenos salarios, buenos trabajos y que tengamos una vida como la que teníamos hace 30 años»
, aunque aclaró que no desea muertes o guerra. Gerardo, quien pidió no revelar su nombre completo por temor a represalias, conocía los informes sobre el posible despliegue de fuerzas militares estadounidenses en la costa norte de Venezuela y las acusaciones del presidente Donald Trump contra Maduro, quien ha sido acusado en EE.UU. por narcotráfico.
Su compañero en el negocio de la construcción, Luis, señaló que los venezolanos han estado frustrados desde las elecciones presidenciales del año pasado, cuando Maduro afirmó haber sido reelegido a pesar de las acusaciones de fraude de la oposición.

Preocupaciones económicas y sociales
Lenin, un empleado gubernamental de 46 años, comentó que lucha cada día por mantener una mentalidad positiva y hacer todo lo posible para mantenerse calmado ante la idea de una guerra.
«Creo que es posible. Me preocupa»
, dijo sobre un posible ataque de EE.UU., aunque destacó que la vida sigue bastante calmada en su zona cerca de la frontera con Colombia.
Otros venezolanos, como Jesús Ríos, un vendedor callejero de pastelitos, evitan expresar opiniones por miedo a terminar en prisión.
«Nadie quiere hablar»
, afirmó, mostrando mayor preocupación por la economía y cómo la inflación afecta los ingredientes de su comida.
Contexto internacional y medidas del gobierno venezolano
En las últimas semanas, la administración Trump ha ordenado el despliegue de docenas de buques de guerra en el Caribe sur, argumentando que su presencia militar busca disuadir el narcotráfico. Las fuerzas estadounidenses han destruido más de una decena de embarcaciones que, según afirmaron, transportaban drogas hacia EE.UU., resultando en la muerte de casi 60 personas.
Estos ataques ocurren en medio de una rápida acumulación de fuerzas estadounidenses en el Caribe, ordenada por Trump como parte de su campaña contra los carteles de drogas. La administración ha señalado que pronto podría autorizar incursiones terrestres en Venezuela para atacar el llamado Cartel de los Soles, una red de narcotráfico que EE.UU. acusa de estar liderada por el mismo Maduro.
Por su parte, Maduro anunció el mes pasado, mientras los buques de guerra estadounidenses se acercaban a Venezuela, que ha activado un escudo en el que participarían millones de militares, policías y civiles entrenados para defender el país.
Represión y arrestos por opiniones
El ministro del Interior venezolano, Diosdado Cabello, publicitó el arresto de un hombre por publicar un estado en WhatsApp a favor de una invasión estadounidense. A principios de mes, dos mujeres que criticaron al gobierno en redes sociales y mensajes privados fueron sentenciadas a 10 y 15 años de prisión.
A pesar de la tensión, muchos venezolanos, como Gerardo, desean que la situación se resuelva pacíficamente y que el país mejore este año.