La Unión Europea impone sanciones a figuras políticas haitianas y a una banda criminal por su presunta implicación en la escalada de violencia
La Unión Europea anunció este lunes 15 de diciembre de 2025 la inclusión en su lista de sanciones al ex presidente de Haití, Michel Martelly, a dos ex senadores y a una poderosa pandilla, señalando su presunto papel en la creciente violencia de las bandas que azota al país caribeño.

Los sancionados y las acusaciones
Junto a Martelly, de 64 años, el Consejo de la UE sancionó a los ex senadores Youri Latortue, fundador del partido L’Ayiti An Aksyon, y Rony Célestin, así como a la pandilla 5 Segond.
El Consejo acusó a Martelly y Latortue de haber «armado y financiado a varias pandillas para promover su agenda política, defender sus intereses personales y económicos y controlar el territorio».
Por su parte, Rony Célestin es acusado de estar «involucrado en violencia vinculada a grupos armados y contrabando». El Consejo lo señala como «responsable de orquestar el asesinato del periodista Néhémie Joseph», quien había expuesto sus actividades ilegales y corrupción.

Antecedentes y consecuencias de las sanciones
Célestin, aliado del asesinado presidente Jovenel Moise, fue imputado el año pasado por un juez investigador haitiano junto al alcalde de Mirebalais, Lochard Laguere, por la muerte de Joseph. Ambos recibieron orden de arresto pero permanecen en libertad.
La pandilla 5 Segond, con base en el barrio Village-de-Dieu de Puerto Príncipe, fue añadida a la lista por ser responsable de robo, violación, secuestro, asesinato, piratería, extorsión, obstrucción de ayuda humanitaria y tráfico de armas y drogas.
Las sanciones implican el congelamiento de activos y la prohibición para personas y entidades de la UE de proporcionarles fondos. Además, se les prohíbe viajar a los países de la Unión Europea.
Contexto internacional y escrutinio creciente
Los tres políticos ya habían sido sancionados previamente por Estados Unidos y Canadá. Para Martelly, quien reside en Miami y fue presidente entre 2011 y 2016, esta es la segunda acción importante en días recientes, tras una solicitud de procesos penales por parte de la agencia anticorrupción de Haití.

Este mayor escrutinio se produce mientras Haití se prepara para reiniciar su proceso electoral y aumenta la presión en el Consejo de Seguridad de la ONU para imponer sanciones a líderes pandilleros y políticos acusados de vínculos con ellos. Hasta ahora, estos esfuerzos han enfrentado la resistencia de Rusia, que acusa a Estados Unidos y Canadá de usar las sanciones para influir en el panorama político haitiano.
Actualmente, solo un político figura en la lista de sanciones del Consejo de Seguridad de la ONU para Haití, que también incluye a dos entidades pandilleras.