El secretario de Estado Marco Rubio emitió un contundente mensaje este jueves durante su visita a Georgetown: «Sería un día muy malo para el régimen venezolano si atacaran a Guyana o a ExxonMobil». La advertencia se dio junto al presidente guyanés Irfaan Ali, en medio de crecientes tensiones por la disputa del territorio del Esequibo.
La Armada de EE.UU. ya muestra su presencia estratégica, con despliegues como el F/A-18 Super Hornet 
. Rubio calificó las acciones de Caracas como «ambiciones territoriales ilegítimas de un régimen narcotraficante».
«Venezuela nunca renunciará a sus derechos sobre el Esequibo ni se intimidará por actos contrarios al derecho internacional», afirmó Delcy Rodríguez, vicepresidenta venezolana.
Expertos sugieren que el gobierno de Nicolás Maduro busca distraer la atención interna y presionar cambios en la política exterior estadounidense. La comparación de Ali con «el Zelensky caribeño» 
refleja la narrativa propagandística del régimen.
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