La batalla pos-Roe: el nuevo frente contra el aborto médico
Coaliciones conservadoras como Susan B. Anthony Pro-Life America y Students for Life han lanzado una campaña coordinada para restringir el acceso a la mifepristona, píldora usada en el 63% de los abortos en EE.UU. La estrategia, llamada «Rolling Thunder», busca presionar a la FDA, el Congreso y tribunales.

El informe que alimenta la controversia
- Base científica cuestionada: El Centro de Ética y Política Pública publicó un reporte que afirma «riesgos subestimados» de la mifepristona, aunque expertos lo tachan de «ciencia basura».
- Meta inmediata: Restaurar restricciones de la era Clinton: prohibir envíos postales y limitar su uso a 7 semanas de gestación.
- Objetivo final: Retirar completamente el fármaco del mercado.
«Es la mayor oportunidad provida desde la caída de Roe vs Wade»
– Marjorie Dannenfelser, presidenta de SBA Pro-Life America
Acciones concretas en marcha
El senador republicano Josh Hawley anunció un proyecto de ley para:
- Limitar acceso a la píldora
- Facilitar demandas contra fabricantes
- Presionar a la FDA para revertir regulaciones
La FDA, bajo el liderazgo de Marty Makary, mantiene por ahora las normas actuales pero dejó abierta la puerta a cambios: «Si los datos muestran señales reales, actuaremos».
Contraofensiva provida
- Campaña cultural: Webinars y eventos para «cambiar la percepción pública» sobre el fármaco.
- Presión legal: Demandas contra médicos en estados con leyes protectoras del aborto.
- Lobby financiero: Buscan retirar fondos federales a Planned Parenthood.

Respuesta del movimiento pro-elección
Organizaciones como Planned Parenthood han:
- Realizado 100+ eventos en distritos clave
- Invertido en campañas publicitarias en Colorado e Iowa
- Calificado el informe de «fraude científico»
Brittni Frederiksen de KFF señala inconsistencias: «Incluyen embarazos ectópicos como efecto adverso, cuando en realidad son contraindicaciones».