Movimiento Estratégico en Tiempo de Crisis
Este sábado, varios bombarderos B-2 despegaron de bases estadounidenses con rumbo al Pacífico, mientras el presidente Donald Trump evalúa públicamente un ataque contra Irán. Aunque este despliegue forma parte de rotaciones regulares hacia una base en el Océano Índico, ocurre en el contexto de una peligrosa escalada entre Irán e Israel.

Armamento Decisivo y División Política
Los B-2, acompañados por aviones de reabastecimiento, son los únicos con capacidad para portar bombas de 30,000 libras capaces de destruir instalaciones nucleares subterráneas como la fortificada planta de Fordow. Trump fijó un plazo de dos semanas para decidir sobre un ataque directo tras una reunión de seguridad nacional este sábado.
Dos facciones dividen su partido: intervencionistas que exigen acción militar y aislacionistas que advierten contra otra guerra en Oriente Medio. Las negociaciones nucleares están estancadas desde que Irán rechazó abandonar su programa de enriquecimiento de uranio.
Escalada Bélica y Evacuaciones
Israel atacó este sábado una instalación nuclear iraní y mató a tres funcionarios militares, ordenando prepararse para una «campaña prolongada». El ministro iraní Abbas Araghchi advirtió que cualquier intervención estadounidense sería «muy, muy peligrosa».
Ante la crisis, EEUU y países europeos evacuaron ciudadanos de Israel. Cerca de 80 funcionarios abandonaron la embajada estadounidense el viernes, mientras el Pentágono desplegó dos portaaviones, destructores y alas aéreas con cazas F-16, F-22 y F-35 a la región.