Audiencia Congresional Examina el «Acuerdo Benévolo» de Epstein
Alexander Acosta, el exfiscal federal de Miami que otorgó inmunidad a Jeffrey Epstein y sus cómplices por tráfico sexual de menores, defendió su decisión de no procesar penalmente a Epstein durante una audiencia a puerta cerrada del Comité de Supervisión de la Cámara de Representantes este viernes.
Testimonio de Acosta y Reacciones
Los congresistas demócratas describieron el testimonio de Acosta como «desafiante», «sin remordimientos» y «evasivo». El exfiscal, de 56 años, afirmó que no creía en la credibilidad de las víctimas y que dudaba que sus historias llevaran a una condena federal exitosa. Rep. Maxwell Frost declaró: «Essencialmente dijo que no tenía fe en las víctimas, lo cual es profundamente perturbador».

Detalles del Acuerdo y sus Consecuencias
El acuerdo permitió a Epstein declararse culpable de cargos menores de prostitución en un tribunal estatal, evitando procesamiento federal por tráfico sexual que podría haberlo encarcelado de por vida. Epstein cumplió solo 13 meses de una sentencia de 18 meses, con liberación laboral que le permitía salir de la cárcel diariamente. Rep. Robert Garcia destacó que una sobreviviente fue abusada durante este período.
Fallo Judicial y Encubrimiento
En 2019, un juez federal dictaminó que Acosta y otros fiscales quebrantaron la ley al ocultar el acuerdo a más de 30 víctimas menores de edad. Muchas de las víctimas, de entre 14 y 16 años, provenían de familias vulnerables o en situación de calle.
Postura Republicana y FBI
El republicano Rep. James Comer enfatizó la necesidad de investigar fallas gubernamentales: «¿Fue Acosta, el FBI, los fiscales locales? Las víctimas pidieron responsabilizar a quienes fallaron». Acosta insistió en que el acuerdo era la mejor opción para evitar que Epstein escapara completamente de la justicia.
Contexto Posterior y Muerte de Epstein
Epstein fue rearrestado en 2019 bajo cargos federales de tráfico sexual y fue encontrado muerto en su celda un mes después, ruledo como suicidio. Acosta, entonces secretario de Trabajo de Trump, renunció días después para no ser una «distracción».