Jueza Bronwyn Miller enfrenta acusaciones por intercambio de mensajes con Katherine Fernandez Rundle
Una jueza de Miami está solicitando que se desestimen los cargos disciplinarios formales presentados en su contra por un panel de supervisión estatal, luego de que se revisaran sus mensajes de texto con la fiscal del condado Miami-Dade, Katherine Fernandez Rundle. La jueza argumenta que no intentó «corromper el proceso» judicial, sino que buscaba «asegurar la justicia».

Detalles de los cargos y la defensa
El mes pasado, el panel encontró causa probable para presentar cargos formales contra la Jueza Bronwyn Miller, quien se desempeña en el Tercer Tribunal de Apelaciones del Distrito de Miami. Los cargos se centran en sus mensajes de texto con Fernandez Rundle, su exjefa, y cuestionan su imparcialidad como jueza, calificando los textos como «aparentemente coercitivos».
En una moción de desestimación de 69 páginas presentada este miércoles, el abogado de Miller, Warren Lindsey, argumentó que los mensajes estaban protegidos por la Primera Enmienda y no tenían relación con ningún caso pendiente ante la jueza.
Contexto del caso Corey Smith
La investigación del panel se centró en los cientos de mensajes de texto que Miller envió a Fernandez Rundle durante las audiencias de resentencia de Corey Smith, líder de una pandilla condenado a muerte por cuatro asesinatos en Liberty City en la década de 1990. Miller había sido la fiscal original que logró la condena de Smith.

Los fiscales finalmente abandonaron la pena de muerte, y Smith fue resentenciado a 30 años de prisión en un acuerdo de culpabilidad. La Jueza Miller indicó en sus mensajes que intentaba proteger su reputación, que sintió fue manchada durante el proceso.
Argumentos clave de la defensa
- Protección constitucional: Los mensajes eran discurso protegido bajo la Primera Enmienda.
- Privacidad: Miller envió los textos desde su teléfono personal y creía que eran confidenciales.
- Falta de coerción: Negó intentar influir en Fernandez Rundle o iniciar los intercambios.
La Corte Suprema estatal decidirá si Miller será sancionada. De upholderse los cargos, podría enfrentar desde una reprimenda hasta la remoción del cargo.
«La Jueza Miller no intentó volcar o derrocar la justicia… Sus acciones fueron morales, y buscó asegurar que se sirviera justicia», afirmó su abogado en la respuesta.